Guía de inversores solares

✔   El inversor transforma la energía solar en energía útil para tu hogar

✔   La vida útil es de unos 10 años, menos de la mitad que la de las placas solares

✔   Su precio oscila entre los 400€ y los 3.500€

A pesar de ser poco conocidos, los inversores son la pieza clave de una instalación fotovoltaica.

Aunque los grandes protagonistas son las placas solares, los inversores son quienes permiten que puedas consumir la energía que producen las placas solares, transformándola en energía de uso corriente. Por lo tanto, son quienes permiten que la instalación cumpla su misión de generar energía útil.

En esta guía encontrarás los elementos necesarios para saber qué son los inversores, cómo funcionan y qué tipos hay en el mercado. Además, entenderás cuál es su vida útil y cuánto tendrás que invertir en ellos.

Si tienes dudas sobre qué inversores necesitas o si todavía no te has decidido a instalar placas solares en tu hogar, rellena este formulario y nuestros expertos se pondrán en contacto contigo para asesorarte.

¿Qué es un inversor solar?

Un inversor es en esencia el ‘puente’ que conecta los paneles solares con tu hogar. Son los que permiten que la lavadora funcione con la energía que generan las placas.

No importa si tu sistema solar es grande, como el de una casa, o pequeño, como el de una caravana o furgoneta, el inversor es imprescindible para que la energía llegue a tus electrodomésticos.

Un inversor convierte la energía que recibe de las placas solares en el modelo de electricidad que usamos en el día a día.

Es decir, el inversor recoge la electricidad de los paneles como corriente continua (DC), que no podemos utilizar, y la convierte en corriente alterna (AC), que es el tipo de electricidad que necesitamos para hacer que la lavadora funcione o enchufar el móvil.

Aunque tengas uno de los mejores paneles solares del mercado, sin un inversor tu sistema simplemente no podrá funcionar porque no podrás consumir la energía producida.

¿Cómo funciona?

Al actuar como intermediario o puente, el funcionamiento es sencillo. Son el centro de control o el cerebro a donde llega la energía y una vez transformada, se distribuye por el sistema eléctrico de tu hogar.

Es decir, los paneles solares funcionan en cadena produciendo electricidad que envían a un único inversor, normalmente situado en el garaje o en el sótano. Un inversor puede recibir la energía de hasta 14 paneles solares. Si el sistema fotovoltaico tiene más de 14 placas solares, necesitarás otro inversor.

Un inversor solar tiene una eficiencia de alrededor del 95-98 %, lo que significa que pierde alrededor del 2-5 % de la electricidad que convierte, que es, en parte, la que el inversor necesita para alimentarse.

Como ves, a pesar de que los paneles solares se lleven la fama, el actor principal en la sombra es el inversor. Si alguno de los paneles solares deja de funcionar, el resto seguirá funcionando y generando energía, pero si el inversor se rompe, todo el sistema falla.

Tipos de inversores solares

Antes de adentrarnos en los tipos de inversores como tal, hay que hacer una primera clasificación referida a la potencia y la configuración eléctrica.

Los inversores distribuyen la energía en una o varias fases, de esta forma, hay que distinguir entre una instalación monofásica y una trifásica. Esto es importante para contratar la potencia adecuada de la luz y no pagar de más en la factura.

Por ejemplo, una instalación monofásica tiene una sola corriente en una fase y es la propia de los hogares. Esta, tiene una tensión normalizada de 230 voltios (V) y una potencia de menos de 10 kW.

En el caso de la trifásica, las corrientes son alternas o en tres fases y es la propia de industrias y empresas. Esta, tiene una tensión normalizada de 400 V y una potencia de menos de 10 kW.

Ahora sí, hay tres grandes tipos de inversores para tus sistemas solares: inversores string (en cadena), microinversores y optimizadores de potencia.

Elegir uno u otro dependerá de cuál sea tu presupuesto y de como de grande o pequeña es la instalación. Es importante que realices una buena inversión, ya que un inversor de mala calidad y barato, puede salir a la larga caro.

Inversores string (en cadena)

El inversor string (o en cadena) es el más barato -y simple- de los tres y se caracteriza porque funciona como un ‘operador’ solitario. Él sólo procesa la electricidad de todos los paneles solares (hasta 14 por lo general).

Su trabajo es continuo y su desgaste mayor porque un sólo dispositivo recibe, transforma y suelta toda la energía.

La sombra es un inconveniente si uno o más paneles están afectados por ella, ya que el inversor sólo producirá la energía del panel con menos electricidad.

Si tu instalación fotovoltaica tiene sombra en algún momento del día, el inversor en cadena no es el conveniente. Sin embargo, sí es una buena opción si ninguno de los paneles se ve afectado por la sombra.

Microinversores

Los microinversores son instalaciones individuales en cada panel solar y funcionan de forma independiente, es decir, si un panel no funciona o está en la sombra, el resto de la instalación no se verá afectada.

Los microinversores convierten la energía continua a alterna in situ, sin necesidad de enviarla a un inversor central.

Optimizadores de potencia

Los optimizadores de potencia son una especie de término medio entre los dos primeros. Los optimizadores se sitúan en cada placa, como los microinversores, pero en lugar de transformar la energía ellos directamente, lo que hacen es optimizarla.

Es decir, unifican la potencia de todos los paneles solares, así, si uno está en la sombra la potencia total no disminuye drásticamente como pasa en el caso de los inversores de cadena.

Una vez optimizada y unificada esa energía, el optimizador envía la energía a un inversor central que es quién hace la conversión final, pero de una manera más eficiente. Son, por lo tanto, más eficaces.

¿Cuál es el mejor tipo de inversor?

En conclusión, el tipo de inversor dependerá de tu presupuesto y especialmente de dónde está el sistema instalado. Si las placas están afectadas por sombras, la opción de inversores de cadena no sería la opción más conveniente y sería más optimo decantarse por los microinversores o los optimizadores de potencia. Los inversores en cadena son una opción si no hay problema con las sombras y tienes un presupuesto más ajustado.

¿Cuánto cuesta un inversor?

El precio de un inversor dependerá de si necesitas solo uno para tu hogar o si lo necesitas, por ejemplo, para un negocio o una empresa, en cuyo caso la inversión deberá ser mayor.

• El precio de un inversor de cadena puede varias desde los 400 a los 2.000 €. A la hora de elegirlo debes de tener en cuenta cuál es la potencia de tu batería (12, 24 o 48 V).
• Los microinversores suelen costar entre 200 y 300 euros por unidad. Tendrás que comprar tantos como placas solares tengas.
• Los optimizadores de energía normalmente cuestan entre 40 y 90 euros cada uno, pero también tienes que tener en cuenta que necesitas un inversor que cuesta alrededor de 600 €.

Algunos ejemplos de buenos inversores:

Un inversor es parte de un sistema de paneles solares y por tanto en principio no se compra sólo, pero dado que su vida es más corta que la de los paneles solares, en determinado momento tendrás que comprar uno nuevo cuando el viejo se rompa.

Recuerda que existen ayudas y subvenciones para las instalaciones solares de las que te puedes beneficiar.

¿Cómo comprar un inversor nuevo?

Siempre es importante que a la hora de comprar un inversor nuevo consultes con tus expertos de confianza o incluso aquellos que realizaron la instalación de tu hogar.

Es importante que sepas la potencia que tenía tu inversor anterior para que este nuevo sea capaz de funcionar con la misma capacidad.

Es decir, si has instalado un total de 5 kWp en tu vivienda, necesitas un inversor de al menos 4000 W para poder aprovechar toda esa energía. Si instalas un inversor de menor potencia, perderás energía.

¿Cuánto dura un inversor?

La vida útil de un inversor string, o en cadena, es de 10 años aproximadamente.

En cambio, los microinversores y los optimizadores de potencia pueden llegar hasta los 25 años de garantía, la misma duración que los paneles solares.

La diferencia en la vida útil entre los distintos tipos de inversores es un componente a tener muy en cuenta. Aunque los microinversores y los optimizadores de potencia son bastante más caros, duran más del doble que los inversores string y, además, generan más electricidad.

Causas del mal funcionamiento de un inversor

Los paneles solares son la parte del sistema fotovoltaico que más cuidado necesita al estar totalmente expuestos (leer el Mantenimiento de los paneles solares para más información), pero los inversores también necesitan de cierto mimo.

Las causas más comunes por las que un inversor se puede estropear son:

Instalación inadecuada

El inversor, como el resto de la instalación fotovoltaica, tiene que ser instalado por un profesional cualificado, es decir un instalador eléctrico autorizado de baja tensión, o empresa instaladora. Cualificación autorizada por el ministerio de Industria en las oficinas de cada comunidad autónoma.

Amigos, cuñados, tú mismo y demás espontáneos con ciertas dotes para la electricidad, pero sin el certificado oficial, simplemente no deberían tenerse en cuenta.

Sobrecalentamiento

Tal y como explican en AutoSolar, el sobrecalentamiento puede producirse cuando las placas solares están expuestas a altas temperaturas. Esto puede hacer que el inversor se apague, provocando cortes de energía.

Diseño incorrecto

Del mismo modo, los sistemas fotovoltaicos mal diseñados pueden provocar diversos problemas, como mayores pérdidas de energía y menor eficiencia.

Ubicación incorrecta

El correcto mantenimiento de los inversores empieza con su correcta ubicación. Obviamente, el inversor no puede estar al aire libre, tiene que estar protegido de las inclemencias del tiempo. Además, puede ser bastante ruidoso.

La mejor opción es un garaje, o cualquier estancia seca, donde corra aire fresco y sin polvo. Salvando las distancias, requiere las mismas condiciones que el proceso de curación de un jamón serrano.

Por último, si tienes baterías, es importante saber que el inversor debería estar colocado encima de las baterías, ya que los vapores que desprenden ocasionalmente las baterías pueden provocar daños.

¿Cuál es el tamaño correcto de un inversor?

Aunque el primer pensamiento sería hacer coincidir la potencia del sistema fotovoltaico con el del inversor, no necesariamente es lo correcto.

En primer lugar, un voltaje adecuado es la mejor garantía para el buen funcionamiento de un inversor. Cada uno de ellos tiene un mínimo y máximo de voltios para que el inversor realice su función,  y es en esta horquilla donde nos tenemos que mover.

Además, hay que tener en cuenta que las placas solares raramente generan electricidad a su máximo nivel, pero los inversores sí. De esta forma es muy aconsejable tener un inversor con un voltaje menor que el máximo nivel que puede generar tu sistema fotovoltaico,  ya que, por ejemplo, un exceso de potencia puede dañarlo.

Por ejemplo, si el sistema fotovoltaico es de 3,5 kW generaría unos 3.000 kWh al año. En este caso, lo aconsejable es adquirir un inversor de 3 kW máximo. No sólamente garantizarán una mejor vida a tu inversor, sino que ahorrarás dinero.

¿Cómo mantener un inversor solar?

Como hemos explicado anteriormente, un correcto mantenimiento alargará la vida útil de tu inversor, así que es fundamental que esté resguardado de las inclemencias del tiempo en un garaje, desván o una habitación bien ventilada y sin humedad.

Con respecto a los microinversores y los optimizadores de potencia, es inevitable que estén al aire libre porque van asociados a cada placa solar, así que es más difícil controlar su manteniendo.

Sin embargo, es importante, al igual que se realiza con las placas solares, realizar revisiones periódicas para revisar su estado.

Conclusión

Después de haber invertido en un buen sistema de placas solares, es conveniente que esa inversión no se eche a perder con un inversor de mala calidad. Es la pieza clave que va a hacer que la energía solar generada se convierta en energía útil para que puedas utilizar tus electrodomésticos.

Cuanta mejor calidad sea el inversor, más eficiente será y por tanto, menos energías perderás en la conversión.

Su vida útil es la mitad que la de los paneles solares, por lo que tendrás que cambiarlo al menos una vez. Elige bien el que más te convenga dependiendo, fundamentalmente, de las horas de sol que recibas y, como no, de tu presupuesto.

Si todavía no te has decidido a instalar placas solares en tu hogar, rellena este formulario y nuestros expertos se pondrán en contacto contigo para asesorarte.

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